sábado, 2 de abril de 2011

Una Guía de Referencia Rápida para los Oidores de la Palabra de Dios

Por Ken Ramey

ANTICIPACIÓN: LA RESPONSABILIDAD DEL OIDOR ANTES DE LA PREDICACIÓN DE LA PALABRA

Preparaciones espirituales:

1. Pasa tiempo leyendo y meditando en la Palabra de Dios cada día (tiempo de quietud personal).

2. Hombres, guíen a su esposa e hijos en tiempos regulares de adoración durante la semana (adoración familiar, lectura bíblica, oración y cánticos).

3. Aparta tiempo el sábado en la noche o el domingo por la mañana para preparar tu corazón para la adoración.

4. Lee una porción de la Palabra de Dios que se enfoque en la adoración a Dios y/o en la limpieza personal del pecado.

5. Da gracias a Dios de que por medio de Cristo puedes entrar con confianza en Su presencia para adorarle.

6. Busca el perdón de Dios por cualesquiera pecados en los que hayas caído para confesarlos y arrepentirte de ellos durante la semana.

7. Expresa a Dios que comprendes que tus mejores y más fervientes intentos de adoración ni siquiera se acercan a lo que Él se merece y suplícale que te ayude a adorarle de todo corazón en espíritu y verdad.

8. Ruega a Dios que te dé un corazón blando y receptivo a su Palabra, de manera que eche raíz y crezca para dar fruto duradero en tu vida.

9. Pide a Dios que ilumine en su gracia tu mente para entender lo que la Palabra significa y cómo se aplica a tu vida, y que te haga un hacedor y no meramente un oidor de la Palabra.

10. Ora por aquellos que estarán predicando/enseñando la Palabra de Dios, que su Espíritu les capacida para hablar con claridad y denuedo, y que sean usados de manera poderosa por Él para obrar en tu vida y en la vida de tu iglesia.

11. Toma la iniciativa de arreglar las cosas con aquellos contra quienes hayas pecado o que han pecado contra ti (tu cónyuge, padres, hijos, hermanos, miembros en la iglesia, etc.).

12. Ve a la iglesia con un espíritu de anticipación, con la expectativa plena de que Dios te hablará por medio de Su Palabra de una manera en que cambiará tu vida para siempre.

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