Descansando en Ti, oh Cristo
Mi alma encuentra gran solaz.
Tu justicia garantiza
Verdadera paz.
Como trapos de inmundicia
Son mis obras para Ti.
¿Cuál mi única esperanza?
Vives, Cristo, en mí.
¡Cuán inmensas tus bondades!
Son más grandes que la mar.
Gigantesca la clemencia
Te complaces dar.
Sí, descanso en Ti, Amado;
De mi alma la salud.
Palabras de vida eterna
Sólo tienes Tú.
Señor, sólo en Ti confío;
Mi corazón no es de fiar.
Todo hombre es mentiroso;
Sólo Dios veraz.
Eres Tú quien satisface
Toda mi necesidad;
Quien compartirá su gloria
Por la eternidad.
Con mi alma en tu regazo
Venzo la perturbación,
Pues tu exaltación en gloria
Es mi entrada en Sión.
Guárdame siempre confiando,
Siempre descansando en Ti.
Yo me comprometo a honrarte
Solamente a Ti.
No hay comentarios:
Publicar un comentario